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miércoles, 1 de marzo de 2017

CALMA KARMA| NANCY CONTRERAS







CALMA
KARMA

poesía y arte plástico



A Thorulf por su paciencia
A Gabriel y Samuel por su amor
                                                                                                                                                      a Mónica por ser guía



ELLA

Ella, tan igualita pero tan distinta a mí.
Café también es ella y mira directo a los ojos,
como si su mirada atravesara tu cuerpo,
como si pudiera adivinar tus pensamientos.

Ella, la otra yo,
a la que tienen miedo de conocer,
miedo de intimar con palabras.

Ella, parada frente a la ventana,
ve el invierno, la primavera, el verano y el otoño,
todos pasan una vez más, y así
vuelve el año a circular.

Y ella, está ahí, en la misma posición de antes,
parada con los ojos firmes, sin mover un dedo,
con el cuerpo encorvado, y casi, casi,
parece que no se percatara del tiempo,
sino hasta que una lágrima cae por su mejilla, entonces
se pregunta.

-          ¿Cuantas vueltas más dará la tierra al sol,
Y yo, ¿estaré ahí en la misma posición?




INFLUENSA

Un gran peso lleno de difusos recuerdos
replica en mi cabeza al amanecer.

Mis manos arriba,
pretenden detener el peso imaginario,
energizado.

Ahora cierro los ojos y siento como los párpados pesan,
la luz molesta, es difícil respirar.

Busco entender el difuso recuerdo
que mi mente brinda.

Ahora lo uso para divagar
con la mente cansada.

Hace frío.



EL DESPERTADOR

Ese ruido dentro de nosotros,
nos alarma para actuar,
impulsivos, libres.

Me dice que no olvide hacer
lo que más he querido.

Me alarma para recordarme
que el tiempo está corriendo,
y que la vida corre con él.

Alguien ha olvidado decirme
cuándo ponerlo




HUELLAS

Al caminar por esas calles,
no pude ver tus ojos claros.

Tu recuerdo me invitaba a buscarte entre aquellos arrabales.

La invasión de tu memoria amenazaba mi palpitar tranquilo.
Lugares conocidos invocaban tu presencia, pero tu ausencia
era lo único que encontraba ahí.

En círculos infinitos, nos pisábamos los pasos.

A cada pisada esperaba el eco del tuyo, mas
aquella tarde nunca pudimos encontrarnos.



SONIDOS DE TI

Esta noche, me siento sobre nubes.
Tu presencia, eco vacío.

La altura me inunda,
el firmamento me marea.
Me veo a la distancia sin provocarte deseo.
Mis ojos opacos -síntoma de angustia por tu ausencia-
reflejan la incertidumbre de no volver a verte.

Mi boca dibuja una sonrisa, efímera,
se desvanece para dejar escapar las palabras:
hoy noche, hoy incertidumbre, hoy tristeza.



LOS AMOS DEL AMOR

En la distancia,
estamos;
en la noche,
nos soñamos.

En la memoria
quedamos;
en nuestras ansias
nos gritamos.

En el silencio
nos oímos;
en la cama
nos amamos.

En el futuro
nos veremos;
en el ahora
nos separamos.




TIRANA

Flotas y vibras por las calles,
me obligas a gritar

¡No te amarres a mis entrañas!

Con tus nudos invisibles de elocuencia y elitismo,
me sofocas.

Saca tu desagradable impaciencia de mi cuerpo,
conviertes mi enojo en desdén.

Tu peste de perfección volátil activa el silencio en la gente,
seduces la vida monótona para seguir autoritaria.

Las palabras que se refractan de ti, al pronunciarse, son secas
y las palabras que se refractan de ti, son frías e inflexibles.

Señora perfección,
asesinas la espontaneidad, la imaginación, la libertad.



EN LA NOCHE

Busco senderos en la travesía de la noche.
Busco la infinita puerta abierta,
con ojos inmersos en una vaga realidad,
distorsionada por la oscuridad.

Despierta espero que anuncies respuestas vivas,
que me anuncies tu regreso.

Deseo dejar esta inesperada tortura,
la misma que dejaste prendida en mí,
con esa mirada.

Pretendo que no me duelas
ni día, ni noche; que no me robes
el sueño y la tranquilidad.

Intento no buscarte con el pensamiento,
frenar el reproche de palabras hirientes.

No quiero invocar nuestros prejuicios de amores antiguos.

Intento, tan sólo,
guardarte en un cajón.



NO LO SÉ

Me empeñé en preguntar
sobre los porqués de nuestros desencuentros.

Tenía miles de preguntas,
deseaba respuestas
a cada uno de mis cuestionamientos,
pero siempre tenías la misma respuesta.

¡No lo sé!, me decías





LA MAR

La tempestad se avecina
y los vientos balancean la barca a lo lejos.

Tu, tiemblas de frío,
te mojas la ropa con el salpicar
de la furia del mar.

Miras el mar con ojos de incredulidad y parece que le preguntas
                ¿Cuánto durará esta tormenta?

El viento sopla fuerte,
pero te veo aún de pie y no sé qué piensas
y yo me pregunto ahora

- ¿Por qué sigues ahí de pie, parada, mojándote?

El mar salta y los movimientos de las olas
parecen los volantes de una falda enorme y hermosa.

Quizá, el mar sea mujer
y es que la Mar baila con falda de volantes blancos gigantes
que traen la esperanza de la libertad que añoras.

Vuelve la furia del mar otra vez.

Ahora, miras hacia el camino,
creo que quieres moverte.

¡Por fin!

Te dejas ir, dejas de combatir.
Das la vuelta y dejas a la mar en su danza,
le dejas revolver sus volantes fantásticos de olas blancas.



CALMA - KARMA

Me extravíe en aquellos pensamientos
descapotados de aquel sitio inherente
donde las contiendas fueron anidadas, pérdidas y ahora
yacen solitarias.

Necesarias de recordar, ahora
se escriben desde la memoria,
para ser cuestionadas en tiempos presentes.



LA LUZ DE LA ESPERANZA

Luz de la esperanza,
alegría del mundo,
infinita vida.

Calienta la vida,
la gente y las inquietudes.

Saquea la incertidumbre,
cobija nuestros sueños
e ilumina nuestros pasos.

En la vida te encontramos,
correr es nuestro destino.

Tú, luz pasiva, ahí estas.

¡No corres!
Solo estás ahí, para ser descubierta
al pasar la tormenta.

Luz de nuestra vida,
no dejes que la luz se esconda entre las nubes.





HAZ LO QUE QUIERAS HACER

Sentada percibo la sombra de tu cuerpo en movimiento.
Reconozco ese espacio en tu mente que me desea.

-          Haz lo que quieras hacer, te digo.

Corre y grita, aquí te espero.
Sube y baja, mientras yo respiro.
Tócame y respírame,
aquí yo te miro.

Duerme y abrázame,
que yo te doy cobijo.
Besa y muerde,
aquí yo te siento.

Haz lo que quieras hacer, excepto,
perderte en el olvido.



MURMULLO FINO

Murmullo fino,
deja que te lleve conmigo
como si fueras parte de mí,
como si hubieras nacido conmigo.

Encontrarte dormido junto a mi cuerpo,
es mi deseo.

Contemplar tu rostro por la mañana,
es mi anhelo.

Entonar el movimiento de nuestro cuerpo.
Ansío entrelazar el murmullo de tu voz en mi recuerdo.
Recitarlo en voz baja para cuando el vacío se instale en mí cada mañana.



INVIERNO

Aterciopelado, el silencio de la noche abriga la nieve,
está profunda y gélida, reluce.

La niebla, gris y pesada, se avecina a mi ventana.
La profundidad de la noche mece el infinito,
me inunda la mirada.

Un viento callado sopla despacio,
los árboles lo sienten y dejan caer la escarcha.
Ahora, se guarda el viento y entra la niebla silenciosa.

La nieve postrada, ha encontrado su lugar.
Con destellos mágicos, blanca,
espera enero.




MUJER

Ven mujer renegada del tiempo,
hoy hace sol.
Reencuentra esa sonrisa
que rompe los hielos,
suaviza y alivia
los corazones.
Aprende a reír otra vez,
que la primavera se acerca.



MALIN, NIÑA CALLADA DE OJOS CLAROS

Miradas de destierro salen de tus ojos
con tu rostro sereno.

Palabras llenas de ira
rebotan en el espacio infinito
que deja tu mirada herida.

Te escurres por la noche
y solitaria vas,
y callada llegas.

Impregnas con aroma de rosas y violetas,
los espacios de tu habitación.

Niña callada de ojos claros,
la noche fría te espera.



DULCE RECUERDO

Dueles como olvido,
dueles hoy conmigo.

Dueles en mis días,
dueles todavía.

Dueles dulce hombre,
dueles que te escondes.

Dueles infinito,
dueles que te grito.

Dueles por hoy,
dueles como soy.

Dueles por el ser que hoy
no quiero saber.

Dueles por doquier, y hoy
sí quiero saber.

Dueles boca fina,
una noche que no termina.





DEFORMIDAD

Nostalgia, un mal sabor de boca.
Recuerdos desangrados del corazón,
sólo enferman el alma.

Cada quién está con sus gusanos interiores,
poniendo barrera al sentimiento,
para no perderse en las masas del amor.

Como si expresar el sentimiento sutil
tuviera que ser desterrado.

En los tormentos de mi propio destino,
de mis desamores imaginarios,
se siente que se hacen barreras de hielo,
de inseguridad personal.

Inseguridades hechas de miedo
con bases de pedazos,
recuerdos dolorosos,
tristezas podridas.

Verdades que matan ilusiones y deformidades,
Perturban el anhelo de sincronía y voluntad.

Deformidades recuerden su forma original.



DUALIDAD

Una línea de energía atraviesa mi cabeza,
me divide entre el juicio de la razón y la sensación,
movimientos de mi cuerpo que transmiten una vibración serpenteante,
que a cada paso y a cada sonido
dejo volar.

Son los movimientos de mi cuerpo,
transmiten una vibración serpenteante que a cada paso y a cada sonido,
dejo volar.

Vibraciones subiendo por mi espalda,
esperan entretejerse en el lado de la sensación,
desdoblan la apatía de la mentira que, implantada,
ha dejado el lado de la razón.



TU ROSTRO

Te imagino empapado por la lluvia
y un carrusel de viento juega con tu cabello. Volteas,
cubres tu rostro mojado. Cierras los ojos y esperas.
El tiempo dibujó tu cara y ahora veo tu rostro aquí conmigo.
Busco el brillo de tus ojos.
El que me brindaste alguna vez.

En tiempo real, decías:
-¡Basta!

Momentos anunciaban el final
y minutos se contaban para decir adiós.

Tú, estarás prendido eternamente en la memoria,
como un rayo de sol al amanecer.




SOLEDAD

Soledad, amarga soledad,
nublas la vista,
revientas tímpanos con ecos en el vacío,
asfixias mi vivir.

Negrura llevas contigo.

Cuando abrazas, pesas toneladas sobre la espalda,
los párpados se vuelven fatigosos.
Lentamente se adormece el alma.

Semblantes de desamparo
descubren la ansiedad del miedo
escondido tras la cortina de la sonrisa.

Expectante tras la oscuridad,
te arrimas a los tristes de corazón,
a los atolondrados de ira,
para que pacten contigo.

Y rompes el vínculo de la comunicación,
y dejas corazones separado, apáticos.

Soledad no te conviertas en la sombra que flota a mi alrededor
No enciendas más focos de nostalgia.



INTROSPECCIÓN

Cuando el cuerpo habla,
                               la voz, calla.

Pensamiento gritas por dentro, mientras,
la cabeza estalla.

Cuerpo indeleble, eres debilidad de pensamiento disipado.
Energía sin fluir, obstruyes la vereda del cuerpo vibrante.
                                               interfieres en el brío que desborda el alma.

¿Cómo se explica a esta máquina llamada cuerpo, a  que no  se duela?
¿Cómo se desactiva esa baja frecuencia que se encaja en las rodillas?

Preguntas sin razón. Respuestas, innecesarias.
Necesaria, la travesía.
Obligado, el camino espinoso.
Súbito, el compás de nuestra pieza a bailar.
Compás, el paradigma del discernimiento entendido,
                archiva fotogramas en la memoria,
                compone la película; la secuencia,
                      es nuestra propia existencia.



EL COLOR DE LAS PALABRAS

Odio instantes como éste,
cuando no sale de tu boca palabra alguna
y en dónde tengo que escarbar hasta con las uñas,
para sacar tus palabras

¿De qué color son las palabras?

Las que hieren,
las que enmudecen el momento,
las que cuando se clavan en el pecho, dan placer al enojo.

Las palabras que han preferido quedarse calladas
por intolerantes, ¿tendrán color?

Odio el silencio incrédulo
que hace que las palabras dejen de ser un vínculo
                                                               y ayuda para los tristes,
porque han dejado de interesarse en ellas mismas.

A veces, las palabras enmascaradas con tonalidades frívolas,
se dejan oír a gritos

A veces, las palabras encerradas como vampiros en la oscuridad
se olvidan de que tienen que ser pronunciadas,
escuchadas.

Las palabras se guardan como un secreto peregrino,
que se escurre cuando el miedo vence tu boca.

Sin sonidos, ni colores,
las palabras se escabullen como imágenes de pensamientos alterados
y aparecen en el umbral de los sonidos.

Impetuosas, las palabras estallan, aniquilan el momento
y quedan perdidas cuando no hay quién quiera escucharlas.





FANTASMAS DEL GUARDA ROPA

I

Resfriado, abrumador, dejas recuerdos activos en mis arterias.
Recuerdos que habían sido depositados en una esquina de mi corazón.
Recuerdos que alguna vez emitieron palpitaciones y evocaron sentimientos.

Tu recuerdo se envuelve en mis arterias, ahora
                llenas de conmociones, cerradas de golpe; inquietas,
                vibran y respiran al compás del corazón.

Lluvia triste, humedeces recuerdos con gotas de sentimiento fiel,
                recuerdos que con el tiempo se creían perdidos,
                recuerdos que ahora se desdoblan como fotos de un libro abierto
                                               y permiten sacar viejas intenciones del guarda ropa.

                Fotogramas de mi memoria
                saltan como recuerdos desprevenidos,
                conscientes de la dicha que me provocan,
                se tornan reflejo de un alma que busca el brillo solar.


II

Me desprendo y no siento mi cuerpo,
no me reflejo en el espejo,
este sentimiento arraigado en el pecho
no me deja saciar la sed de aliviar el recuerdo.

Añoro esos reflejos de luz en mi ventana.
Esta oscuridad me aleja de la realidad,
me permite el reclamo a mis erratas.

Luz de verano,
¡vuelve! Regresa a mí,
repleta de tus espectros.
                Quédate, formando geometrías,
                quédate formando un rayo de paz.


III

Te visualizo como un fantasma, dolido,
                                               se apodera de mí.

Tu recuerdo ha abierto las puertas al pasado,
yo aprovecho para sacar a pasear los viejos fantasmas
del guarda ropa.





CORAZÓN DE MUJER

I

Mujer de música en las venas,
naces para obedecer.
Naces para tejer cariño al ajeno.
Esa es tu función: tejer, coser
y adornar para corazones extraños de hombres
que no saben tejer corazones para sí mismos.

Mujer cocinas para alimentar corazones hambrientos.
Mujer cuidas el corazón;

                abrigar y cuidar es tu deber en el hogar.

Mujer brindas todo y te descobijas.
Olvidas que también eres proveedora y cargas un corazón
                                                                              también debe ser cuidado.


II

Hombre, estás hecho para demostrar que tu corazón es duro como el acero
y, en secreto, lo dejas al cuidado de una mujer.

Hombre, supones que tu corazón está en una caja guardado bajo llave
y prefieres tirarla al mar, para no abrirte, sensible.



III

Mujer “tu deber” es ser esclava y amante,
pertenecer a esa generación de mujeres amarradas a la puerta,
atadas a la pata de la mesa,
pegadas al sartén,
adheridas al hijo,
decoradas sobre la escoba.

Mujer necesitas respeto por tu trabajo.
Que alguien avale por ti,
que alguien más hable por ti.

Mujer de boca cerrada, de grandes pensamientos,
hacedora del futuro de tus hijos,
cumplidora de los fieles deseos de tu interlocutor,
menosprecias tu propio deseo.

Mujer préstame tu foto,
quiero compartir tu mirada.
Mujer de corazón grande,
¡Libérate!





JULIO

Sin completa oscuridad,
la noche de verano ha caído.

Se vislumbra 24 horas en el norte.
Y en el horizonte, se asoma una tenue luz en el cielo.

                                               El sol no dormirá hoy, ni mañana.

Anciano de fuego, se esconderá hasta que las hojas de los árboles
hayan caído, marchitas crujirán bajo el peso de las caras largas y
agonizarán bajo los pies de semblantes tristes.

Anciano de fuego, tus brazos largos abrazan la tierra,
tu brillo deslumbra.

                Tus brazos largos que caen en línea recta sobre las calles.
                Rebotan para deslumbrar la euforia de los paseantes.

                Gente extasiada por tu llegada.

                               Miradas y sonrisas saltan en la ciudad,
                               alegre despertar anuncio de luz ,
                                               muere el invierno,
                                               renace el verano




LOS ZAPATOS DE HERMES

Con estos zapatos voy a volar,
quiero alcanzar otros destinos.

No, estos zapatos no tienen alas,
tienen deseos,
deseos de correr,
deseos de pisar lugares nuevos.

Este camino, estos zapatos
ya se lo saben conocido,
y las cuatro estaciones del año
ya las ha recorrido.

Si, ahora están esperando correr
por otros lugares menos densos,
desean correr estos zapatos.

Donde correr se sienta como volar,
donde estos zapatos se vuelvan como alas en el andar.



EL HAMBRE Y LAS ENTRAÑAS

Doloroso, se vuelve el hambre con las horas.
Sedienta, busco algo,
nada cerca que comer.

El refrigerador está vacío de ilusión,
ilusión que duele en las entrañas.